Con el crecimiento de las ventas en línea, crecen también las emisiones globales de CO2 que se generan por la manufactura, la realización de pedidos, el transporte, la entrega de mercancías y, por supuesto, el transporte de las posibles devoluciones. El incremento de las compras en línea conlleva también un aumento de las devoluciones y, como consecuencia, de las emisiones de CO2. No obstante, los distribuidores y el sector logístico pueden ayudar a reducir el impacto negativo de las devoluciones mediante la implementación de una estrategia logística de devoluciones que utilice métodos de transporte eficientes, ubicaciones de devolución adecuadas y que reduzca el desperdicio de papel.
La venta en línea está en auge mundialmente... ¡y no solo por el coronavirus! Pero con la cantidad creciente de paquetes entregados, también crece el esfuerzo que implica la correspondiente gestión de devoluciones. Cuando hay una mercancía entregada que no cumple las expectativas del cliente o que llega incompleta o defectuosa, se inicia el proceso de devolución y, como consecuencia, vuelve a emitirse carbono.
Además de encontrar vías adecuadas para una entrega de última milla sostenible, optimizar el proceso de devolución es una parte crucial para poder implementar una logística «verde» y sostenible.
Una de las maneras más importantes de incrementar la sostenibilidad de la gestión de devoluciones es mejorar la eficiencia del transporte. En este caso, los criterios más importantes son:
La ubicación estratégica de los puntos de procesamiento de devoluciones ahorra costes de transporte y reduce considerablemente las emisiones de CO2.
Cuando las devoluciones se gestionan con un proveedor de servicios externo o con un procesador de devoluciones, lo ideal es optar por proveedores locales para reducir las distancias de transporte y, por ende, las emisiones de carbono.
Se aconseja utilizar el almacenamiento de terceros (3PL) en países grandes. La mercancía devuelta puede volverse a incluir en el inventario en línea para ese país específico y revenderse sin necesidad de hacer otros envíos internacionales.
Uno de los gastos más elevados de los pedidos internacionales, tanto a nivel económico como medioambiental, es el envío de paquetes individuales. Y una de las mejores maneras de reducir la huella de carbono del proceso de devolución es evitar las devoluciones individuales con una solución que retenga, durante un tiempo, varios pedidos de devolución hasta devolverlos juntos. Otra forma de reducir las emisiones de carbono es agrupar productos de una misma marca o enviarlos al mismo destino.
Las tiendas en línea que cuentan con un portal de devoluciones son cada vez más importantes para que el proceso de devolución sea más sostenible, adecuado y centrado en el cliente. Esto es así, sobre todo, porque el portal de devoluciones reduce el desperdicio de papel: ya no es necesario incluir en el paquete las etiquetas físicas de devolución, puesto que el cliente puede descargarlas en línea cuando lo necesite.
Un estudio reciente de YouGov sobre las preferencias de los compradores en línea realizado en nueve países europeos ha demostrado que los clientes prefieren las devoluciones sin papel y que optan por descargarse las etiquetas de devolución en línea en lugar de usar la versión impresa que se incluye en el paquete. Los resultados son claros: el 72 % de todos los encuestados considera que la etiqueta de devolución descargable o el formulario de devolución son «importantes» o «muy importantes».
¿Pensar globalmente y actuar localmente? ¡Pues claro, también cuando se trata de la gestión sostenible de las devoluciones! Disponer de una red local de transportistas, almacenes y centros de distribución como, por ejemplo, puntos de entrega e instalaciones de almacenamiento, puede ayudar a garantizar que las devoluciones lleguen antes y de forma más sostenible a las estaciones correspondientes.
Unas distancias de transporte más cortas reducen el tiempo y permiten que la mercancía se vuelva a vender y a enviar rápidamente; además, esta mercancía no tiene que almacenarse durante mucho tiempo y, en consecuencia, se ahorran espacio y recursos.
Los puntos de entrega locales permiten a los clientes llevar la mercancía a pie para su devolución, así pueden aprovechar cuando van al trabajo o a la compra.
Disponer de más puntos de devolución locales se traduce en una mayor comodidad y reduce la necesidad de conducir hasta un punto de devolución, reduciéndose así las emisiones de carbono en la última milla.
Ofrecer rutas más cortas supone una mayor comodidad para los clientes.
Los procesos de devolución más rápidos permiten acortar los plazos de entrega y realizar el reembolso antes, con lo que se incrementa la satisfacción de los clientes.
Seven Senders ofrece a los remitentes el acceso a más de 100 transportistas de última milla para ayudar a implementar un proceso de envíos inteligente. Nuestra solución integral de plataforma de envíos abarca todas las demandas de envío, incluyendo una gestión sólida de las devoluciones.
Con la ayuda de nuestro portal de devoluciones, los clientes pueden crear una etiqueta de devolución en pocos clics, y los distribuidores pueden enviar notificaciones automáticas de manera proactiva sobre el estado de la devolución.